La talavera poblana tiene sus orígenes en el siglo XVI. El nombre proviene del poblado español «Talavera de la Reina» lugar donde se realizaba este tipo de cerámica. La mezcla de los diseños locales con los métodos españoles dio origen a lo que se conoce como talavera poblana. Para su elaboración se utiliza barro blanco y negro, así como pigmentos minerales para la producción de los colores.
La talavera original se decora con azul, amarillo, negro, verde y naranja sobre una base blanca. En un inicio, se elaboraban principalmente azulejos para revestir iglesias y conventos; en la actualidad, la técnica se utiliza para crear objetos ornamentales de lujo.
Puebla, Puebla.